Liberan a mujer indígena que pasó injustamente 16 años en prisión por presuntamente asesinar a su nieta

Nezahualcóyotl, Estado de México(NDS).- Tras 16 años presa en el penal de NezaBordo en el Estado de México, por presuntamente asesinar a su nieta de dos años, Virginia Silvestre, fue liberada y absuelta del delito al que había sido sentenciada a 43 años de cárcel. 

De acuerdo con un reportaje, Virginia estaba acusada de la muerte de su nieta Yaretzi, pues según el Ministerio Público, la mujer mazahua confesó haber golpeado y azotado a la niña contra el suelo en cinco ocasiones luego de que tirara una olla con caldo de pollo. 

“Gracias a Derechos Humanos que nos apoyo mucho porque la verdad no teníamos dinero para buscar un buen licenciado y pues muchas gracias por su apoyo de ellos (…) yo sé que hay justicia”, dijo Virginia al salir de prisión y rodeada de una multitud que la esperaba. 

Por su parte, Sharon Hernández, abogada de la mujer, declaró que durante la detención, a Virginia se le dificultaba comprender el idioma español, además de que se acreditó que en ese momento ella no sabía leer ni escribir. 

“El problema también fue que para obtener su declaración la torturaron”, dijo.

De acuerdo con lo declarado por Virginia y testigos de lo que ocurrió, Yaretzi murió cinco días después de sufrir una caída y pese a que fue llevada a un hospital. 

El dictamen forense señaló que la menor no contaba con golpes en el cuerpo, solo con una lesión en la cabeza que correspondía a una caída, son embargo, pese a las pruebas, Virginia recibió una condena de 43 años, pero gracias a una amnistía logró salir de prisión. 

Debido a que la familia nunca pudo contratar una defensa, un despacho de abogados tomó el caso de Virginia sin cobrar un solo peso, posteriormente la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México revisó el caso y un juez determinó que todos sus derechos procesales y humanos habían sido violados. 

Virginia entró a los 40 años a la cárcel; hoy tiene 56 años y por fin pudo regresar con sus hijos a los que no vio crecer.

Es un caso muy representativo porque difícilmente se da una amnistía por delitos de esta naturaleza (…) Creo que queda muy claro que se cometen y se cometían violaciones graves, que a Virginia le pudo haber costado estar 43 años en la cárcel y que se haya resuelto de esta manera es un acto de justicia evidente y reivindicar una causa y una vida”, mencionó Hernández.