El embajador responde a los comentarios de la canciller Alicia Bárcena, quien afirmó que se había advertido sobre el tráfico de armas de este tipo hacia México.

El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, desmintió el jueves 25 de enero las afirmaciones de la canciller Alicia Bárcena del pasado lunes, quien aseguró que las armas incautadas al crimen organizado por el Gobierno Federal pertenecen al Ejército estadounidense.
«No son armas del Ejército de los Estados Unidos, al parecer mío, porque yo no tengo ninguna información, en los dos años y medio que yo he estado aquí, que estas sean armas que vienen del Ejército de los Estados Unidos», expresó en declaraciones a medios.
El diplomático emitió esta respuesta en relación a las declaraciones de la secretaria de Relaciones Exteriores, quien había afirmado que durante la reciente reunión con funcionarios de Washington, advirtieron sobre el tráfico hacia México de armas de uso exclusivo del Ejército de Estados Unidos.
«Hay una cosa muy importante y es que la Secretaría de la Defensa alertó a los Estados Unidos sobre armas que están entrando a México que son de uso exclusivo del Ejército estadounidense, y es muy urgente que se haga una investigación al respecto», aseguró la canciller en la conferencia matutina del Gobierno del lunes.
Salazar sostuvo que las armas que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha incautado al crimen organizado podrían tener «los calibres» utilizados por el Ejército estadounidense, pero enfatizó que no provienen directamente de las Fuerzas Armadas.
«Eso sí es posible (que sean del mismo calibre), pero no son, a vista mía y de la información que tengo, que vienen del Ejército de los Estados Unidos», enfatizó.
El diplomático aseguró que, al tratarse de una preocupación bilateral, se comprometerán a investigar y comprender la realidad del asunto.
Asimismo, resaltó la colaboración entre los presidentes de México, Andrés Manuel López Obrador, y de Estados Unidos, Joe Biden, en el compromiso de «realizar todas las acciones posibles para disminuir el flujo de armas que ingresan a México».
El Gobierno de México ha solicitado en varias ocasiones a Estados Unidos que detenga el ingreso de armas al país, argumentando que los cárteles de la droga y grupos criminales las utilizan en sus enfrentamientos, ya sea contra las Fuerzas Armadas o contra grupos adversarios.
El pasado lunes, México celebró que la Corte de Apelaciones del Primer Circuito de Estados Unidos emitió un fallo a favor del país, permitiendo así que continúe con su demanda contra fabricantes de armas en Estados Unidos. El argumento detrás de esta acción legal es que las prácticas comerciales de dichos fabricantes facilitan que estos productos lleguen a manos de criminales.